Desde el inicio de su mandato, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha insistido en que su gobierno seguirá el principio de “abrazos no balazos”, aún cuando, en los hechos, le ha transferido cada vez más control sobre la seguridad pública al mismo Ejército que protagonizó la “guerra contra las drogas” durante el sexenio del presidente Felipe Calderón Hinojosa.
Este dicho ha sido un punto focal para fuertes críticas, sobre todo, ante la persistencia de la violencia homicida en México y los hechos que periódicamente demuestran la impunidad de los grupos delictivos a pesar de la multiplicación de efectivos de las Fuerzas Armadas en las calles.
La historia reciente en México debe representar una alerta frente a cualquier política que permita un mayor abuso del uso de la fuerza letal, lo que en buena medida, es una consecuencia directa del cada vez más empoderado Ejército mexicano. Históricamente ha sido una estrategia bajo la cual México transita desde el momento más pacífico de su historia hasta la época más violenta, esto último referido al periodo contemporáneo. Por esta razón, es relevante explorar más a fondo el dicho y el discurso del presidente, pues así se comprobaría si las críticas tienen validez o si es una distracción más que empobrece el debate y la búsqueda de soluciones eficaces a las problemáticas asociadas a la seguridad ciudadana en el país.
En esta entrada de Descifrando nos preguntamos acerca de la estrategia e indagamos si es que existe una política de “abrazos no balazos”, con base en los datos sobre los enfrentamientos con grupos civiles reportados por el Ejército, la Marina, la Guardia Nacional y la anterior Policía Federal.
¿Hay menos enfrentamientos entre civiles y las Fuerzas Armadas en el gobierno de López Obrador?
Cuando comparamos los primeros tres años del gobierno de López Obrador con las administraciones previas, la primera respuesta es afirmativa, las Fuerzas Armadas registran menos enfrentamientos con personas civiles. Durante el gobierno de Felipe Calderón (2006 a 2012), el Ejército, la Marina y la Policía Federal registraron un promedio de 46 enfrentamientos por mes, en el sexenio de Peña Nieto (2012-2018) registraron 35 por mes y durante los primeros tres años de López Obrador – sumando la Guardia Nacional – se han registrado 32.
La gráfica que presentamos a continuación, demuestra que la actual administración sigue la misma tendencia establecida en los últimos dos años del gobierno de Peña Nieto. Aunque la Marina (SEMAR) reporta mucho menos enfrentamientos y el Ejército (SEDENA) ligeramente menos, la nueva Guardia Nacional registra más enfrentamientos que la antigua Policía Federal, sobre todo bajo el mando directo del Ejército. No obstante, considerando que se registra casi la misma cantidad de personal desplegado, es notable que la Guardia Nacional registró solo 268 enfrentamientos durante el segundo y el tercer año del gobierno de López Obrador, comparado con 497 del Ejército.
Es importante destacar que, existen dinámicas regionales específicas detrás del panorama nacional. Las Fuerzas Armadas reportan más conflictos con civiles armados en estados como Guanajuato, Michoacán, Sonora y Zacatecas, en donde también ha incrementado la violencia homicida (consulta esta tendencia a detalle aquí).
En la siguiente gráfica, cada círculo representa un enfrentamiento registrado por las instituciones mencionadas en los seis años previos a 2022, todos ellos agrupados por el mes en el que ocurrieron. Para explorar el interactivo aplica el filtro o sigue las flechas para conocer las tendencias a nivel estatal.
¿Y los enfrentamientos, son más o menos letales?
Para analizar si las Fuerzas Armadas han reducido el uso de la fuerza en cada enfrentamiento, podemos ver las cifras de personas civiles reportadas como agresores, fallecidas, heridas o detenidas en cada evento.
La siguiente gráfica representa una anatomía del saldo de los enfrentamientos durante cada administración: la cantidad de personas fallecidas, heridas y detenidas por cada diez enfrentamientos.
¿Hay casos en que las Fuerzas Armadas no logran someter a los agresores?
Otro indicador que da cuenta de la posibilidad de que las Fuerzas Armadas ahora contengan más su fuerza letal o sean rebasadas por los grupos civiles armados es la proporción de enfrentamientos en los cuales no se registran bajas (detenciones o personas fallecidas) por el lado de los civiles.
La siguiente gráfica demuestra la proporción entre enfrentamientos con y sin bajas civiles, por fuerza y por administración. Tocando cada barra, se puede ver la proporción de estos eventos en donde las autoridades sufrieron bajas.
Conclusiones
Los datos sobre enfrentamientos reportados por el Ejército, la Marina y la Guardia Nacional, refutan la idea de que exista una estrategia de “abrazos no balazos,” sobre todo cuando se trata del Ejército mexicano, que sigue la misma estrategia de contención a los grupos delictivos desarrollada durante el sexenio de Peña Nieto: menos letal que el gobierno de Calderón, pero con alta letalidad y conflictividad en el estado de Tamaulipas.
La Guardia Nacional se ve más involucrada en las renovados frentes de contención en estados cómo Guanajuato y Michoacán, y no ha suplantado las labores del Ejército en las regiones donde este último ha sido más activo, sobre todo en Tamaulipas. Es posible que la coordinación de actividades por parte del Ejército sobre la Guardia Nacional, explica en parte por qué la nueva Guardia no ha suplantado al Ejército en términos de los enfrentamientos registrados y la letalidad de los mismos.
En palabras del nuevo comandante de la segunda región militar, el general Ulises Orduña Campos: “Esa [abrazos no balazos] no es una estrategia, es una versión que ha dicho el señor. Tal vez el mensaje no es para nosotros sino para aquellos que están empleando las armas en contra de la sociedad, nunca lo dijo a las autoridades”.
Tanto los datos como la versión del general Orduña Campos demuestran la futilidad de responder al discurso presidencial, así como la necesidad de desarrollar alternativas a la misma estrategia de seguridad enfocada en el despliegue de las Fuerzas Armadas a nivel nacional.
Datos utilizados
Enfrentamientos entre las Fuerzas Armadas / Federales y personas civiles en México, 2007 a 2021
Autor: Programa de Seguridad Ciudadana, Universidad Iberoamericana CDMX | 01/01/2007 a 31/12/2021
Detalles
Fuentes:
Guardia Nacional 2800100001221, 332259822000230, 332259821000099; SEDENA 330026421000345, 0000700170620; SEMAR 330026622000617
Instituciones:
SEDENA, SEMAR, Guardia Nacional, and Policía Federal
Consideraciones:
Las cifras reportadas por la Guardia Nacional se reciben desde distintas partes de la institución – las coordinaciones territoriales compuestas en su mayoría de personal en activo en el ejército, y las direcciones especiales compuestas de diversas direcciones de la antigua Policía Federal. Por lo tanto, la base de datos se divide entre “Guardia Nacional Militar” (coordinaciones territoriales) y “Guardia Nacional Civil” (direcciones especiales). Se debe de tomar en cuenta que hay cada vez más personal de origen militar asignado a las direcciones especiales.